1.- Cojines y almohadas con estampados y texturas interesantes.
2.- Mantas y cobijas suaves y acogedoras.
3.- Cuadros y fotografías enmarcadas para colgar en las paredes.
4.- Velas decorativas y candelabros para crear un ambiente cálido.
5.- Plantas y flores en macetas o jarrones para añadir vida y frescura.
6.- Tapetes y alfombras con diseños llamativos y texturas suaves.
7.- Cortinas y persianas para controlar la entrada de luz y añadir privacidad.
8.- Espejos de pared para hacer que la habitación se sienta más grande y brillante.
9.- Cestas de mimbre y otros materiales naturales para almacenamiento y decoración.
10.- Figuras decorativas como esculturas o estatuillas para añadir interés visual.
11.- Lámparas de mesa y de pie para iluminación ambiental y decoración.
12.- Bandejas y platos decorativos para servir y exhibir objetos decorativos.
13.- Libros y revistas para añadir color y textura a los estantes y mesas.
14.- Marcos de fotos para mostrar recuerdos y momentos especiales.
15.- Adornos y detalles decorativos como velas perfumadas, estatuas de animales, tazas decorativas, etc.
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